Nocturno

¿Quieres subir a la ventanita del cielo y ponerle un par de cortinas al amanecer?ahora tengo frío y si deja de llover no tendré excusas para seguir temblando, ¿en donde puedo dejar de construirme si ya no es de noche? Asómate a la puerta y di que ya no estoy, si tienes fe al volver cambiaré la canción. ¿Sabes en qué pienso cuando no existo? En gaviotas, gaviotas enfermas soñando con el mar antes de morir en tierra ¿en ausencia de olas quien se llevará sus huellas? Podría contarte un historia graciosa ¿podrías olvidar que soy un hombre triste? Chopin nunca estuvo triste, la tristeza le amó y el no pudo más que corresponderle. Comienza mi carta con una fecha que no es la de hoy y el lugar donde estoy ¿son cosas mías o estás raíces me están sembrando muy lejos? Comienzo una carta a lo que vendrá porque del presente nadie me ha querido hablar: agradeciendo de antemano su pronta respuesta, un desesperado abrazo para usted, señor Porvenir. Un, chan, chan. Esto suena tanto a mis olas que podría ahogarme dentro de poco. Un, dos, tres… Parece que Chopin si estuvo triste.