Cabe destacar que sus abrazos son una necesidad constante, que fueron buscados, reclamados de manera silenciosa, con fin aparente, sin principio definido, y si fueron encontrados no me di cuenta. Los incompletos no ven señales en la gente, solo en el suelo, en el pasto, en el uno para nadie, porque las llaves solo cierran en una dirección, y abren dándonos la espalda, por insuficiencia de alma, por terminar el día con un sentido común y contrario a nosotros. Sabiendo todos que mi sonrisa es una rueda que gira lejos de un verso en clave, en un coro de caracoles no habitados, que de vacíos sonamos a mar, la misma melodía contando mil cosas, de cosas que vuelven incompletas, de presencias sin persona. Cabe destacar que alguien bajó los brazos, ya los hologramas no se conforman con disculpas, son defensores del permiso del querer y nadie dió la orden de seguir adelante, mil disculpas y una intención apagada, sabremos sonreír cuando las ganas se vayan.